Redactamos varios protocolos (páginas y páginas), diseñamos carteles informativos, testeamos su comprensión y aplicación.
Constatamos que los carteles sobrecargados no se entienden, que mucha información satura, que los textos no todo el mundo los entiende, y que al final no se aplican ni las medidas básicas.
Ponemos a disposición de todas las personas que suben en nuestros barcos ese cartel, lo comentamos con ellas, lo que entienden, lo que se puede hacer y lo que no, lo que se debe y lo que no. Comprobamos que de esa forma se aplica el 100% de las medidas esenciales.